Porciones: 12
INGREDIENTES
1 caja de gelatina de naranja de 8 porciones
2 tazas de agua (500cc)
1 caja de gelatina de frutilla de 4 porciones
1 taza de agua (250cc)
1 caja de gelatina de durazno de 4 porciones
1 taza de agua (250cc)
1 caja de gelatina de manzana de 8 porciones
2 tazas de agua (500cc)
7 sobres de gelatina sin sabor (49 gramos)
2 litros de agua (2000cc)
1 taza de azúcar
INGREDIENTES
Preparación de las gelatinas
Gelatina naranja. Calentar a punto de hervor 1 taza de agua.
Volcar el agua caliente sobre la gelatina de naranja y mezclar hasta que esté disuelta la gelatina.
Agregar 1 taza de agua helada y mezclar.
Verter el contenido en un molde previamente aceitado, donde la gelatina una vez coagulada llegue a tener 2cm de espesor.
Reservar en la heladera durante unas horas o mejor de un día para otro.
Preparar siguiendo los mismos pasos la gelatina de manzana.
Colocarla en otro recipiente y llevar al refrigerador.
Con la gelatina de frutilla y de durazno hacer el mismo procedimiento pero empleando ½ taza de agua caliente y ½ taza de agua helada.
Al día siguiente cortar en cubos las distintas gelatinas y colocarlas en un recipiente.
Con las manos entreverar bien los cubos para que los distintos colores se mezclen bien.
Reservarlos en el refrigerador.
Aparte, poner 1 y ½ taza de agua en un recipiente.
Agregar la taza de azúcar y llevar al fuego siempre mezclando hasta que el azúcar se disuelva.
Retirar del fuego y volcar la gelatina sin sabor.
Mezclar bien hasta disolverla e integrarla por completo.
Agregar el agua restante bien fría, (de esta forma se acelera el proceso de coagulado).
Aceitar el molde y agregar 1 cm de gelatina sin sabor.
Llevar al refrigerador por unos minutos o hasta que empiece a coagularse.
Retirar el molde del refrigerador y agregar los cubos de gelatina.
Luego con cuidado y lentamente agregar gelatina sin sabor hasta que llegue al borde del molde.
Llevar al refrigerador hasta el día siguiente.
Para desmoldar se puede humedecer las manos y presionar ligeramente con los dedos todo el contorno donde está la gelatina, procurando despegarla.
Luego desmoldar.
Truco para desmoldar la gelatina: introducir el molde en un recipiente con agua tibia, dejar unos segundos y desmoldar.
En el momento de servir se corta en rodajas y se sirve así o acompañada con un copo de crema de leche batida (nata).